Simón, esta es una poesía que me enseñó mi abuelo Rafael (tu bisabuelo) seguramente algún día te la dirá tú abuela Lulú, y entonces ya sabrás de que se trata cuando se la digas a algún hijo tuyo (o sobrino, o a cualquier niñito que conozcas!)
El sinpar borracho Antón cayendo de un tropezón gritó con todo su aliento:
¿Quién se cayó?
Y en la pared de un convento el eco le respondió: YO
Mientes pícaro yo fuí, y si el casco me rompí lo taparé con pelucas: LUCAS
¿Me conoces tú tunante? más aguárdame un instante y conocerás mi navaja: BAJA
Bajaré con sumo gusto ¿te figuras que me asusto? Al contrario más me exalto: ALTO
¿Alto yo? piensa el osado que rico laurel ganado dejaré yo aquí marchito: CHITO
¿Cúal perro callar me mandas? No callaré en todo el día hasta que tu lengua impía con un acero taladre: LADRE
¿Cúal perro ladrar me mandas? Por dónde estás? Por dónde andas? Que de no verte me aburro: BURRO, BURRO, BURRO....
Cansado al fin de vocear por fin Antón se durmió y el eco también ceso al punto de no sonar!
(Tradición Oral)
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5 comentarios:
Gracias...llevaba tiempo buscando al sin apr borracho Antón..sólo recordaba algunas aprtes...
en la parte de te dejare ahi marchito.. CHITO
Y se atreve el insolente mandar callar a un valiente, que calle yo ni se hable!! HABLE
Pues no callo en todo el día hasta que a tu lengua impia con un machete taladre.. LADRE
Cual perro ladrar me mandas? en donde estas, en donde andas que de no verte me aburro...
Cansado ya de gritar, al fin Anton se durmio y el eco tambien calló al tiempo de arremedar...
Según me dicen, le falta
Me recuerda a Rene con 9 años recitando en Café y Arte con mucha seguridad y soltura.
Muy bien, así es
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