

Esta soy yo y este eres tú antes de nacer, llevo 9 meses esperando a conocerte, pensando que va a ser lo mejor para tí y como nos la vamos a llevar, llevo 9 meses pensando que errores no quiero comoter y como quiero que sea tu vida, por lo menos durante los primeros años, antes que puedas manejar, conquistar chicas, tomar aguardiente y estudiar en cualquier lugar del mundo. Esta soy yo intentando aprender lo necesario para no defraudarte, y para hacer que tu vida sea muy feliz y equilibrada. Decidí dejar de trabajar para quedarme contigo y enseñarte y no perderme tus primeros pasos o tus primeras palabras. (En este momento tienes 5 meses y 3 semanas) y debo decirte que ha valido la pena estar contigo, cada sonrisa, cada balbuceo y cada cosa nueva que aprendes es lo máximo!
Este diario, está escrito para tí. Ya tienes 5 meses y medio, casi 6 y debo decir que eres lo más bonito que me ha pasado en la vida. Te voy a contar en este espacio de hoy lo más importante que ha pasado contigo desde el día en que te ví por primera vez.
El 15 de noviembre del 2007, llegaste a mi vida a las 4 y 47 de la tarde, primero te llevaron a hacer un montón de exámenes y a limpiarte y ya después me dejaron darte un beso y la bienvenida a este mundo. Una hora más tarde, cuando ya me habían cocido y demás (naciste por cesárea porque estabas sentado) el Dr. llamó a tu papá y casi no lo puede creer. Esa noche dormimos los tres en el cuarto del hospital, en realidad sólo dormimos tu y yo porque tu papá no pudo hacerlo, pues el sofá era además de chiquito incómodo. Esa noche no quisite comer de mi, entonces un enfermera te daba con un chupito y una jeringa. A la mañana siguiente amanecimos y tú seguías así como un cahorrito indefenso que acaba de llegar, eras tan chiquitito que me daba un poco de impresión cargarte, pero no quería que estuvieras en otro lado lejos de mi... Sin embargo, llegó una enfermera y te llevó a la sala de "neonatos" y como a la hora yo ya muy preocupada y malgeniada pregunté por tí y me dijeron que te iban a hospitalizar porque eras "hipotónico", eso quiere decir que no tiene tono muscular=que parecerías una babita. Yo me puse furiosa y no quería que te dejaran allá, sin embargo me tocó dejarte por 4 días y yo me sentía muy triste porque no estabas a mi lado, y además muy adolorida porque la cesárea me dolía muchísimo y tenía que ir de mi casa a la clínica para poder verte.
Finalmente, te vió una doctora neuropediatra y nos dijo a tú papá y a mi que no tenías nada, que simplemente habías nacido peresozo y que eso era todo ¡¡¡POR FIN ME FUI A MI CASA CON MI BEBE!
Aquí estás internado en la clínica Reina Sofía de Bogotá, como me puse tan brava, los doctores dijeron que estaba desequilibrada y me dijeron que podía estar adentro contigo todo el día si quería. Teniendo en cuenta que solamente se podía entrar a las 6-9-12-3 y 6 durante una hora cada vez, creo que fuí afortunada y pude estar contigo todo el tiempo que quise.
No hay comentarios:
Publicar un comentario